¿Sabías qué el desorden de tu hogar afecta tu salud mental?

El desorden es un problema común que puede impactar significativamente en la salud mental. En un mundo tan acelerado, a menudo las personas se encuentran abrumados por una gran cantidad de tareas y responsabilidades que los llevan a descuidar su entorno físico y emocional.

El desorden en el espacio físico puede ser un reflejo de la mente caótica, lo que puede aumentar la sensación de estrés y ansiedad. Sentir que no pueden controlar su entorno puede generar sentimientos de desesperanza y frustración, lo que puede afectar su autoestima y la capacidad para tomar decisiones importantes.

Un estudio del Journal of Environmental Psychology  demuestra que “el desorden puede disminuir la sensación de bienestar, felicidad y la seguridad que una persona obtiene de estar en sus espacios personales”, afirma Catherine Roster, coautora del estudio y profesora de la Anderson School of Management de la Universidad de Nuevo México (Estados Unidos).

En parte, esto se debe a que muchos de nosotros reconocemos que “nuestras casas pueden estar desordenadas porque nos sentimos abrumados y desorganizados mentalmente”, afirma Natalie Christine Dattilo, psicóloga clínica de Boston e instructora de la Facultad de Medicina de Harvard (EE. UU.)

“El desorden y la desorganización conllevan una pérdida de productividad difícil de cuantificar”, afirma Levitin. Señala la cantidad de tiempo que la gente pierde buscando objetos perdidos, faltando a citas o retrasándose en el trabajo o los estudios por culpa del desorden. “La persona media pierde probablemente el 5% de su tiempo debido a la desorganización”, afirma; “toma tu salario anual, multiplícalo por el 5 por ciento y podrás medir lo que la desorganización puede estar costándote”.

Dónde y cómo empezar

Aunque muchas personas reconocen y desean los beneficios para la salud mental y física que se derivan de una mayor organización, algunas no saben por dónde empezar.

“Aconsejo empezar poco a poco”, dice Dattilo; “es fácil sentirse abrumado si intentas ocuparte de una habitación entera o incluso de un armario, así que puedes prepararte para el éxito empezando por un solo cajón, una estantería o la despensa de la cocina”. También sugiere hacer la organización más agradable escuchando música o un audiolibro mientras lo haces y “pasar tiempo en tu espacio recién organizado después para permitirte disfrutarlo”.

Khorana recomienda reservar un tiempo específico para ordenar y organizar, y Roster sugiere imaginar lo bien que te sentirás al tener un espacio organizado como motivación para empezar. “Piensa en cómo podrías utilizar el espacio para otro fin que mejore tu vida o te ayude a ser más productivo”, dice. También recomienda buscar ayuda, si es necesario. “Un familiar, un amigo o un organizador profesional pueden ayudarte si no sabes por dónde empezar”, dice.

En cuanto al proceso de organización, Julie Morgenstern, organizadora profesional y autora de Organizing from the Inside Out [Organizando de dentro hacia afuera], aconseja clasificar los objetos en categorías como conservar, tirar y reubicar. Sugiere tener un lugar para cada objeto que quieras conservar, purgar los que no vayas a usar y guardar en otro sitio los objetos sentimentales o de temporada o la decoración a la que no necesites acceder a menudo. “Si tienes objetos de los que no quieres separarte, como archivos fiscales, papeles de la universidad, recuerdos o muebles, considera la posibilidad de guardarlos en otro lugar”, dice. “Así sacarás los objetos de casa sin el trauma de purgarlos permanentemente”.

 Tomado de nationalgeographic.com.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

es_COSpanish